Siempre llueve en París en primavera
Pilar Aguarón Ezpeleta
Llovía en París. Siempre llueve en París en primavera. Faltaba casi
una hora para que saliera su tren. La estación estaba llena de gente extraña.
Todos ajenos a los problemas del vecino. Una señora la mojó con su
paraguas, un muchacho que corría para no perder el tren la empujó. -¡Merde!-
murmuró el joven.
En la cafetería no cabía un alma, no entró. Se sentía perdida,
insegura, tan lejos de todo lo cotidiano. Buscó un sitio donde sentarse. Había
unas largas filas de asientos metálicos pintados de azul. Casi todos estaban
ocupados, se sentó en el primer asiento de la segunda fila. Un viajero con una
maleta de ruedas buscaba un hueco y con un gesto le indicó que quería pasar.
Ella se levantó para dejarle sitio y de repente sucedió, su mirada
se cruzó con la mirada de un desconocido, sintió cómo si una descarga eléctrica
le sacudiese el cuerpo, su corazón empezó a latir más fuerte, fue un instante,
una alucinación, un milagro, notó como el desconocido se turbaba
por sentir la misma emoción que sentía ella. Se quedaron de pie uno
frente al otro, sin decirse nada, mirándose en silencio, un instante, una vida.
-Excusez-moi! susurró él, como si supiera que a partir de
ese instante siempre fuera a estar en deuda con ella.
Ella le siguió con la mirada mientras se alejaba. Él no se volvió.
©Pilar Aguarón Ezpeleta
El próximo domingo 24, a las 19,30, tendrá lugar un recital de relatos breves de Escribiendo esperanza, en Zaragoza, en El pedacito de cielo (C/ Jerónimo Blancas, 7) Participarán Pilar Aguarón Ezpeleta, Marcos Callau, Anabel García Capapey, Eva Hinojosa, Roberto Malo, José Antonio Prades y David Rozas. Amenizarán la velada los músicos Mario Iriarte e Irene Roche. En este recital se podrán adquirir ejemplares de Escribiendo esperanza y también se hará una presentación del libro. Os esperamos.
Tan fantástico tu blog
ResponderEliminarlo que ponés o escribis
tiene sabor a romance y misterio
abrazo
desde
el otro lado
del universo